Este es un libro para leérselo no
solo de un tirón, sino para releer el principio después de haberlo
terminado.
Antonio
Yammara, protagonista y narrador de El ruido de las cosas al caer, es un
muchacho común que vive en Bogotá y pasa su vida como cualquiera, sin embargo
es de la generación que pasó su adolescencia y juventud en el periodo del
terror y de la guerra tácita que vivió Colombia en los ochentas. Sentimiento
que algunos peruanos que pasamos nuestra adolescencia y juventud en ese periodo compartimos, pero nuestra guerra fue la del terrorismo de Abimael Guzmán y no el de los
narcotraficantes.
Con
mucho sabor a recuerdos, Antonio narra su encuentro con un singular personaje.
Esos personajes de los que uno quiere ser amigo y compartir sus más hondos
secretos y saber el porqué de sus cosas, de sus miradas y de su vida.
Antonio
conoce a Ricardo Laverde en un billar, un hombre que jugaba sin ansias de
perder o ganar, solo lo hacía para socializarse, conversar un rato y pasarla
bien. Antonio al enterarse que había salido hacía poco de la cárcel, se intriga
y trata de serle amistoso. Sin embargo Laverde se comporta cortante y sin evasiones.
Al
parecer Laverde se da cuenta de su desaire y trata de ser simpático con el
joven Antonio, contándole que su esposa vendría a visitarlo por
navidades. Su entusiasmo contagia a Antonio que sin saber por qué se alegra por
ello. Pasado un tiempo se vuelven a encontrar en el billar y Laverde le pide un
favor, le pide que lo ayude a encontrar un toca casete. Más tarde al verlo
escuchar el aparato con audífonos, lo ve llorar desconsolado, cuando menos
piensa, ya se había ido. Antonio va detrás de él y este le confiesa que su
esposa había muerto en un accidente de avión al ir a visitarlo por las fiestas.
Sin
darse cuenta ambos reciben un par de balazos mientras Laverde le contaba su desdicha. Es a partir de allí que la vida
de Antonio cambiaría para siempre y seguiría su vida en busca de respuestas,
perdiendo el interés por su matrimonio y su trabajo. Una coincidencia lo
llevaría a otra y así podría irlas encontrando.
Juan Gabriel Vásquez en un escritor colombiano. Estudió Derecho en su ciudad natal, en la Universidad del Rosario, y después de graduarse, partió a Francia, donde se instaló en París (1996-99). Allí, en La Sorbona se doctoró en Literatura Latinoamericana. Luego se mudó a un pequeño pueblo de la región de Ardenas, en Bélgica. Después de un año de vivir allí, Vásquez se instaló en Barcelona, donde residió hasta 2012. Actualmente vive en Bogotá (Colombia).
